





Un clima de pánico se apoderó de la ciudad de Butembo. Un jefe Mai-mai que había causado tamaña desolación, tanto a los civiles como al ejército gubernamental, en Beni, y también en Rutshuru y Lubero, ha aparecido súbitamente en Butembo. Se trata del coronel Kava wa Seli, conocido como cofundadador y comandante de las Fuerzas Ecuménicas para la liberación del Congo, FOLC, un grupo Mai-mai iniciado bajo los auspicios del actual gobernador de la provincia del Nord-Kivu, que había establecido primero su cuartel general en Nyamilima (agrupamiento Binza) en el territorio de Rutshuru, en 2008, antes de trasladarse más tarde a Beni (al final de la rebelión del CNDP en el Nord-Kivu).
La presencia en la ciudad de Butembo del señor Kava wa Seli inquieta al más alta nivel a las fuerzas vivas (líderes sociales, políticos, y religiosos) en vista de las especulaciones que circulan sobre el tema de su misión oscura en la región. Además, esta inquietud se ve reforzada por la alerta dada por el que descubrió su escondrijo en un hotel del lugar, en el barrio Katwa; ya que este informador estima poseer datos que demuestran el carácter peligroso de la misión de este Mai-mai en dicho medio. En efecto, Kava wa Seli estaría en una misión de raptos y asesinatos de ciertas personas señaladas de antemano como líderes de la sociedad civil, políticos, y religiosos.

Kava wa Seli es peligroso, ya que está siempre en conexión con la red de los Mai-mai traidores en la que se encuentra el famoso « camaleón » Lafontaine. Además, fue este Lafontaine quien en otro tiempo lo proveyó de los medios humanos y materiales que permitían a los FOLC instalar sus actividades en el gran Nord-Kivu (después de haber cerrado el estado mayor de Nyamilima). Fue en base a este apoyo de Lafontaine como Kava wa Seli y sus hombres de los FOLC atacaron el puesto fronterizo de Kasindi, y llevaron después a cabo la triste acción de las carnicerías de Nyaleke. La actual tergiversación de Lafontaine es de todos conocida. Es además la razón de su acantonamiento junto al sanguinario coronel Bisambaza en Uganda. Sin embargo, en vista de que el acceso al terreno se le hace cada vez más difícil, a causa de su apoyo a los asesinos que degüellan a sus hermanos en Beni y en Lubero, parece probable que Kavawa Seli haya sido elegido para asegurar la continuidad de su obra maquivélica común. Por esta razón la actual presencia de Seli en Butembo es tan peligrosa como la intrusión de una víbora en casa.
Las autoridades congoleñas son muy especiales en la gestión del caso de estos criminales. Es quizá uno de los raros países que hacen girar la ley al revés. Es el mundo de la impunidad en el que la pretendida Justicia se lanza sobre los inocentes y se dedica a blanquear a los culpables mediante todo tipo de maniobras. En este caso de Kava wa Seli, a quien se supone que está en prisión a consecuencia de la carnicería que había organizado contra los militares del centro militar de Nyaleke y sus dependientes (esposas e hijos), acto que le había costado una condena pública en Beni. Y ahora vemos que regresa triunfalmente, investido de nuevos poderes por el régimen que, ya por este único acto de dejarlo libre, demuestra toda su complicidad al lado de los criminales, terroristas y bárbaros, que mantienen una colonia de inseguridad sobre el país.
Para toda información a propósito de Kava wa Seli se puede leer « La continuación de la hora de las revelaciones sobre el asesinato del Padre Vincent Machozi y las masacres de Beni », especialmente la rúbrica que habla de los FOLC.
Gift Baraka .
Butembo
©Beni-Lubero Online





