La ausencia del Sr. Julien Paluku Kahongya, Gobernador de la provincia del Nord-Kivu, de su puesto en Goma se prolonga ya por más de tres semanas. La autoridad provincial había partido de Goma para Nairobi (Kenia) con una autorización de viaje que menciona oficialmente motivos médicos. Después de haber pasado dos semanas en el extranjero, Julien Paluku organizó sin embargo un salto hasta Goma y Kinshasa, de solamente tres días de duración, y luego regresó. Había venido en realidad a presentar el informe preliminar de su misión secreta a su patrón (Joseph Kabila), aprovechando para sacar fondos de la caja del tesoro público cuyas llaves guarda.
Mientras tanto, los funcionarios del gobierno provincial totalizan ya un retraso de dos meses en el pago de sus salarios. Se desprenden entonces de ahí varias especulaciones. También ciertas personas creyeron equivocadamente que el Gobernador estaría huyendo para evadirse de los numerosos problemas que le rompen la cabeza en su provincia.
Hoy, las investigaciones de BLO han descubierto toda la verdad de lo que se ocultaba alrededor de la prolongada estancia de Julien Paluku en Nairobi. Es bastante escandaloso, pero nuestros servicios tienen la obligación de revelarlo al público por el supremo bien de la Nación.
En efecto, el Gobernador de la provincia del Nord-Kivu prosigue su estancia en Nairobi en el cuadro de una misión secreta de varios alcances:
Puesta a punto con el ex-M23
El Gobernador tiene una misión de extrema urgencia, confiada por el Presidente Kabila. Se trata de completar la planificación de la desestabilización del Este del país, utilizando el potencial de la antigua rebelión del M23, en alianza con las marionetas que han sido aleccionadas entre figuras salidas los grupos armados del gran Nord-Kivu. Se ha estimado Nairobi como un sitio bastante seguro para guardar y mantener el secreto de los encuentros de Julien Paluku con Kakolele, Richard Bisambaza, y John Tshibangu. Ya que los encuentros similares que ese Gobernador organizaba antes durante sus pasajes por Beni y Butembo no tardaban en ser descubiertos enseguida.
El gran complot en curso para empeorar la desolación del Este de la RDC se tiene a nivel de los apartamentos Daikyo/Chania, donde el mismo Julien Paluku se aloja en el último piso del número A5. Allí es donde tiene su misa negra en compañía de Bisambaza, un coronel desertor de las FARDC que se convirtió en uno de los actores principales de las masacres de Beni, de Kakolele Bwambale, el hombre de los recados del poder local en Kinshasa, al servicio de los desastres en el Este de la RDC, y de John Tshibangu, otro coronel desertor de las FARDC, permanentes siempre en los programas de las rebeliones pro ruandesas que desestabilizan el país a partir del Este.
¡Lo peor de todo es el reclutamiento de mercenarios terroristas!
El emplazamiento de Nairobi presenta otra ventaja para la reunión del círculo progubernamental del proyecto de desestabilización de la RD del Congo: es su cercanía al conjunto del mundo terrorista del cuerno de África del Este, a partir de Somalia y de otros medios musulmanes. Desafortunadamente, el poder de Joseph Kabila es precisamente de esos terroristas de quienes tiene ganas. Julien Paluku y sus colaboradores, aquí señalados, están en plena campaña de reclutamiento de terroristas de los que Kabila tiene necesidad para instalar el terror en la ciudad de Kinshasa y en otras ciudades muy bien escogidas a través del país, con una particular inclinación por las aglomeraciones que se encuentran en la parte Este. El proyecto de reclutamiento de terroristas por la empresa política de Kabila no es un hecho nuevo en el repertorio de publicaciones de Benilubero Online, que reconoce haber alertado muchas veces a la opinión sobre este punto.
Aunque les disguste a quienes, por fanatismo o exceso de confianza, dudarían de la veracidad de tal misión criminal en cabeza del Gobernador de la provincia, bajo el impulso del mismo Jefe del Estado. Ya que una realidad es incontestable: todas las pruebas de las sesiones de trabajo con los criminales aquí señalados en la dirección mencionada de Nairobi/Kenia, aportan una confirmación irrefutable sobre este punto. El pueblo congoleño en general, y el del Nord-Kivu en particular, deberían sacar todas las conclusiones que se imponen de estos hachos, con el fin de definir un modo de comportamiento apropiado para desafiar sin más tardar semejante proyecto satánico.
Dan Joël SHUKURU
Corresponsal de BLO en Nairobi
